El SC Magdeburgo ha cerrado el año con victoria por 25-30 sobre el ThSV Eisenach y completa un 2025 casi perfecto para los de Bennet Wiegert. Líderes invictos e indiscutibles de la Bundesliga,  cinco puntos de ventaja sobre el segundo, líderes invictos en EHF Champions League 25/26 y vigentes campeones de la mayor competición de clubes del planeta.

Poco más se le puede pedir a un SC Magdeburgo que no ha perdido un solo partido en la temporada 25/26 en competición doméstica y continental. Diecisiete victorias y dos empates en la Bundesliga, tres eliminatorias de la Copa de Alemania superadas y diez victorias en EHF Champions League en otros tantos partidos.

Unos números que le permiten cerrar el 2025 en una posición privilegiada, líderes de la Bundesliga con cinco puntos de ventaja sobre Flensburg-Handewitt, líderes del Grupo B de EHF Champions League con dos puntos de ventaja sobre el Barça, habiendo ganado el partido disputado en el Palau, y clasificados para la Final Four de la Copa de Alemania.

El único partido que ha perdido el SC Magdeburgo esta temporada fue ante el One Veszprem en las semifinales del Mundial de Clubes disputado en El Cairo el mes de octubre, 23-20.

Todo ello en un contexto muy favorable de la temporada anterior, en la que se proclamaron campeones de la EHF Champions League venciendo al Barça en semifinales y al Füchse Berlin en la final con el Hispano y futuro portero del Barça Sergey Hernandez como héroe de la final.

Sus registros en la Bundesliga durante la primera parte del 2025 también fueron excelentes con solo dos derrotas, ante THW Kiel y Füchse Berlin, pero no pudieron alzarse con el título debido a sus malos resultados en el inicio de la 24/25 por las notables bajas por lesión que sufrieron. En el sprint final por el título se quedaron a un punto del Füchse de Mathias Gidsel.

Algo que también les influyó en Champions League, pero el formato de la competición les permitió recuperarse, jugar los play-offs y batir al Veszprem de Xavi Pascual en una apasionante eliminatoria de cuartos de final para alcanzar la Final Four y acabar sumando un nuevo título. 

La solidez del combinado de Bennet Wiegert está más que demostrada y el Magdeburgo apenas ha realizado cambios relevantes en su plantilla esta temporada más allá de la llegada del islandés Elvar Orn Jonsson y la salida de Antonio Serradilla, ya fichado por el Stuttgart cuando se consagró como pieza clave defensiva del equipo junto al gran Magnus Saugstrup.

Un 2025 casi perfecto para el equipo alemán y un 2026 que pinta igual de bien, con un dominio claro en la competitiva Bundesliga y con su presencia en cuartos de final de la EHF Champions League virtualmente cerrada.

Un equipo competitivo como pocos y sin puntos débiles aparentes que se ha convertido en los últimos años en el rival a batir en EHF Champions League y en la bestia negra del Barça, lo que hace aun más interesantes sus duelos.

Merecido descanso para el equipo alemán, que volverá a la carga tras un parón de selecciones en el que la mayor parte de sus jugadores disputarán el Europeo de balonmano 2026.