La federación polaca de balonmano ha confirmado que Patryk Rombel no continuará al frente de la selección tras el Mundial, el técnico finaliza contrato en marzo y no será renovado. Su asistente Bartosz Jurecki será el relevo temporal hasta encontrar nuevo seleccionador.

La decepcionante actuación de Polonia como anfitriona en el pasado Campeonato del Mundo, decimoquinta posición, ha provocado un cambio de ciclo y la búsqueda de nuevo seleccionador. Una actuación más inconsistente en cuanto a juego exhibido que a resultados, ya que el nivel de la nueva generación polaca está lejos de la generación de oro a la que han relevado.  

Patryk Rombel asumió la dirección de la selección polaca en 2019 con el objetivo de reconstruir el equipo nacional tras un durísimo cambio generacional que había dejado al país centroeuropeo sin Europeo 2018 y Mundial 2019.

En estos años el técnico polaco ha ido formando un bloque sólido apostando por las nuevas estrellas del país como Szymon Sicko, Adam Morawski, Arkadiusz Moryto, Michal Daszek o Michal Olejniczak, además del lesionado Kamil Syprzak. Si bien no ha sido suficiente para conseguir buenos resultados en el Mundial que ha organizado Polonia.

"Después de analizar la situación y consultar con la junta directiva, he decidido que el contrato de Patryk Rombel no será renovado. Tanto yo como la dirección de la federación polaca de balonmano apreciamos el trabajo, esfuerzo e involucración del entrenador construyendo un nuevo y potente equipo. Sin embargo, en deporte, los resultados siempre son lo más importante y éstos no han llegado" ha señalado el presidente de la federación polaca Henryk Szczepański.

Bartosz Jurecki seleccionador temporal de Polonia

La destitución de Rombel deja a Polonia sin seleccionador de cara a los dos partidos de clasificación para el Europeo de 2024 que disputará ante Francia el mes de marzo. La federación polaca ha elegido a Bartosz Jurecki, segundo de Rombel, como seleccionador provisional hasta que elijan al sustituto definitivo. 

Precisamente Bartosz Jurecki es uno de los grandes nombres de la generación de oro polaca junto a Slawomir Szmal, Karol Bielecki, los hermanos Lijewski, Mariusz Jurkiewicz o su hermano pequeño Michal Jurecki entre otros.

Tras la cuarta plaza en los JJOO de Rio 2016, con Talant Dujshebaev al frente, se retiraron de la selección cerrando una etapa histórica (una plata y dos bronces mundiales) y dejando al país centroeuropeo en manos de un profundísimo relevo generacional.