La federación croata de balonmano ha presentado en la mañana de hoy a Dagur Sigurdsson como su nuevo seleccionador para el próximo ciclo olímpico. El técnico islandés es el primer entrenador extranjero que se pondrá al frente de la selección balcánica.

Una contratación que estaba muy avanzada hace un mes, tras la destitución de Perkovac, pero que se ha demorado en el tiempo por los problemas de Sigurdsson para romper su contrato con Japón, a la que entrenaba desde 2017.

El técnico islandés debutará con Croacia el 14 de marzo en el Preolímpico de Hannover, en el que intentará la clasificación para los JJOO de Paris 2024 midiendose a Austria, Argelia y el anfitrión Alemania. Una prueba complicada al no tener apenas tiempo para preparar el torneo y tener un debut decisivo ante los austríacos.

Una apuesta firme tanto de la federación croata, que pagará más de 300.000 euros anuales a Sigurdsson de sueldo, como del propio entrenador que ha dejado la selección japonesa a unos meses del inicio de los Juegos Olímpicos, para los que ya estaban clasificados.

Además del inminente preolímpico y los posibles JJOO de Paris en verano, Sigurdsson también trabajará con la mente puesta en el Mundial 2025 del próximo mes de enero en el que Croacia es coorganizadora junto a Noruega y Dinamarca.

El exinternacional croata Denis Spoljaric será el entrenador asistente de Sigurdsson, ambos había coincidido en su etapa en el Füchse Berlin con el primera línea croata aun en activo y el técnico islandés como entrenador del equipo berlinés.

Se espera que en los próximos días, lunes probablemente, Sigurdsson anuncie una convocatoria inicial de 22 jugadores para preparar el Preolímpico.