El Ciudad Real se proclamó ayer campeón de la Champions League por segunda vez en su historia al vencer por 25-31 al Kiel y remontar así los dos goles de desventaja del partido de ida. El conjunto manchego superó todas las adversidades(jugar en una cancha complicada, llevar 2 goles de desventaja, tener varios lesionados etc.) y se marcó un auténtico partidazo en Kiel, tirando de garra, coraje y como no, de calidad. Desde el inicio del partido el C.Real se puso por delante con alguna ventaja de hasta 2 goles, Olafur Stefansson llevaba las riendas del ataque y Kallman comenzaba a machacar como hizo en todo el partido. En defensa salían las cosas y como no, Sterbik empezaba a amargar a los germanos. Tras un parcial de 4-0 en los últimos instantes se llegó al descanso con 2 goles de ventaja, 13-15, con un Kiel que jugaba a tirones y al que le perdonaron bastante los colegiados. En la segunda parte el Ciudad Real se fue afianzando, la defensa asfixiaba a los alemanes, sobre todo Kallman que desde el avanzado estaba anulando a Karabatic y Sterbik seguía a lo suyo, parándolo todo. En ataque las cosas seguían igual, Kallman machacando desde el extremo, al contraataque etc. y Olafur decidiendo en estático(y muy seguro en los 7m, tarea pendiente del Ciudad Real en los últimos tiempos). Pese a jugar un tanto alocados en algunos momentos, la defensa permitía al C.Real mantener por delante en el marcador, Karabatic y Jicha naufragaban, Kim Andersson estuvo desaparecido, y el equipo teutón no funcionaba bajo las órdenes de Szilagyi. La efectividad de Kavticnik y el siempre seguro Ahlm mantenían la final abierta. El Ciudad Real afrontó el último tercio del partido rondando la gesta, siempre con ventajas de 3 o 4 goles, que comenzaban a ser una losa para un Kiel sin ideas. A poco más de 12 minutos del final los 5 goles de ventaja en el marcador enmudecieron a un Sparkasse Arena que veía la victoria demasiado lejos. Y Sterbik continuaba magnificando su actuación... Tras pasar una mini-crisis al fallar 3 ataques sencillos(penetración de Olafur, contraataque de Kallman, y "pérdida" de Alberto), el C.Real sentenciaba definitivamente la final, aumentando de nuevo de 3 a 6 su ventaja. Los últimos minutos fueron un tanto trabados, el CR jugó varios minutos en inferioridad y ahí asumió la responsabilidad Ales Pajovic, que anotó dos goles consecutivos mientras el banquillo y jugadores comenzaban a celebrar la hazaña. Kallman anotó sun undécimo gol en los últimos segundos, y Olafur finalizó también por encima de los 10 goles, 12 para ser exactos. El partido de Sterbik soberbio, excepcional, sublime... como quieran llamarlo. La nota negativa del encuentro tuvo lugar en el último minuto, cuando Zeitz montó una trifulca en la que se vieron involucrados varios jugadores, Zeitz, Dinart y Pajovic fueron expulsados, y Entrerrios y Zorman intercambiaron algún golpe con un espectador. Segundo título para Ciudad Real con sabor a hazaña, y mereciendo un gran "Enhorabuena", por el esfuerzo, por el partidazo y cómo no, por su título.