La crisis económica mundial que vivimos en la actualidad sigue cobrandose víctimas entre los clubes de balonmano europeos, ahora le ha tocado el turno al Flensburg-Handewitt alemán que ha anunciado una serie de medidas ante la reducción de ingresos de cara a la próxima temporada que afecta a los salarios de la plantilla.

La razón principal que argumenta el club germano para tomar estas medidas además de las reducciones presupuestarias por la crisis, es la no clasificación del equipo para la próxima Champions League, lo que disminuye considerablemente los ingresos para la temporada 2009/2010.

Las dos medidas más significativas son la ausencia de subidas salariales para la temporada 2009/2010 y la reducción de los salarios base y las primas en un 15% según los datos ofrecidos por el club, aunque otras fuenten citan incluso un 20%.

A pesar de ser un acuerdo consensuado entre todas las partes, ya se han publicado posibles declaraciones de algún miembro de la plantilla criticando la reducción de los salarios al considerar que el contrato que habían firmado con el club debe cumplirse y la politica de fichajes de club en las últimas temporadas, donde se ha gastado demasiado dinero contando siempre con alguna aportación, y ahora que en plena crisis esas aportaciones no llegan se pagan los excesos.

No hay que olvidar que el Flensburg-Handewitt pagaba hace un año aproximadamente 750.000 por el jugador montenegrino Alen Muratovic.

Desde el club germano se espera la implicación de los jugadores con el proyecto actual, pero el pivote Michael Knudsen ha sido el primero en desvelar que deberá pensarse su futuro tras esta decisión.

Precisamente Knudsen ya había hecho con anterioridad declaraciones en los medios daneses sobre un posible regreso a Dinamarca al finalizar su contrato con el Flensburg.